CORTÉS, ubicado en la zona norte del país con una población de aproximadamente 2,185,000 personas, es históricamente uno de los departamentos más importantes de Honduras. Conformado por 12 municipios, dos de ellos, Puerto Cortés y Omoa, le ofrecen una amplia gama de bellas playas y refrescantes ríos.
Además, se disfruta de una rica gastronomía propia de la zona y se conoce sobre la cultura garífuna, por ubicarse gran parte de su población en las comunidades de Travesía y Bajamar.
También se refrescan los conocimientos sobre la historia colonial al visitar la Fortaleza de San Fernando de Omoa. Y si de balnearios hablamos, Santa Cruz de Yojoa le espera con refrescantes y cristalinos ríos ubicados por doquier, ideales para calmar las temperaturas fuertes que se sienten en Semana Santa. Le mostramos un recorrido de los sitios que puede visitar para hacer de sus vacaciones de verano, una fecha inolvidable.
Puerto Cortés posee un total de seis encantadoras playas que están al alcance de los turistas: la Municipal, Bajamar, Travesía, Cienaguita, la Vacacional y El Faro. En la gráfica, la playa Municipal ubicada en el barrio El Porvenir y es la más visitada por los turistas.
Las playas de Cienaguita en Puerto Cortés, es otro destino favorito de los visitantes. Se encuentra en la Carretera Internacional CA-13 hacia Omoa. Posee 2 kilómetros de extensión. Se puede disfrutar de una amplia gama de restaurantes, parqueos, champas para rentar, baños, duchas y seguridad garantizada.
Las bellas playas de Omoa dejan sin aliento a los visitantes por su extrema belleza. Un total de seis playas adornan este municipio: El Faro, Buena Vista, Muchilena, Masca, Mar de Plata y Omoa. Y si esto fuera poco, cuenta con impresionantes parques acuáticos, Rawacala y San Fernando de Omoa.
En la comunidad de Bajamar y Travesía ubicadas a 20 minutos del centro de Puerto Cortés, encontrará extensas, hermosas y refrescantes playas que abarcan unos 10 kilómetros. Aquí el turista disfruta y conoce parte de la cultura garífuna en sus diversas manifestaciones gastronómicas, música y danza.
Las Cataratas Pulhapanzak. Situadas a 18 kilómetros. del Lago de Yojoa, en la aldea de San Buenaventura, municipio de San Francisco de Yojoa. Es considerada una de las más bellas cascadas de Centroamérica por sus aguas cristalinas y una catarata de 43 metros de altura. El lugar cuenta con cabañas, restaurante, champas, zonas para acampar, mirador, piscina, juegos infantiles, canchas de fútbol y senderos. Además, los viajeros pueden disfrutar de la cascada realizando canopy.
Si desea conocer sobre la historia del municipio, el sitio ideal por visitar es la Fortaleza de San Fernando de Omoa. Compuesto por una edificación de valor histórico y antropológico, declarada Monumento Nacional según el Acuerdo Ejecutivo No. 170 del 20 de marzo de 1987. Se sitúa al oeste de Puerto Cortés, a unos 18 kilómetros.
En el Lago de Yojoa, cerca de la carretera CA-5 encuentra los Canales de Los Naranjos ubicados en la comunidad del mismo nombre. Es el sitio ideal para los que gustan de las aventuras extremas en el agua, practicando kayak. Es un sitio sumamente paradisíaco que le regala una vista espectacular. Se estima que el tramo general es de aproximadamente 700 metros, desde el punto de partida, hasta la desembocadura del Canal del Lago de Yojoa.
El impresionante Lago de Yojoa, con su diversidad de hábitats, como humedales, bosques y áreas abiertas, proporciona un refugio para una amplia variedad de especies, convirtiéndolo en un paraíso para los amantes de las aves y la observación. Una de las principales atracciones al visitarlo, es degustar de un delicioso pescado frito que ofrecen los distintos restaurantes.
Angeli Garden ubicado en la falda del Merendón en SPS. Es otro sitio que debe visitar por estar rodeado de naturaleza, luz y encanto. Posee un impresionante mirador que le permitirá respirar aire puro y maravillarse con la vista. Además, con un impresionante huerto, y un amplio y elegante restaurante donde se puede degustar de exquisitos platillos.
Armenta y El Zapotal. Son atractivos turísticos muy visitados por los sampedranos durante la temporada. Por la popularidad del río Armenta, los habitantes de la zona lo han bautizado como “El balneario de los pobres”.