Compensan con $1.3 millones a familia de hondureño que fue asesinado por un agente del FBI

ESTADOS UNIDOS. Un juez estadounidense otorgó casi dos millones de dólares en daños y compensación como parte de una demanda civil tras concluir que un agente del Buró Federal de Investigaciones (FBI, en inglés) fue negligente al disparar contra un hondureño en Texas.
El hecho, que desencadenó la muerte del hondureño Ulises Valladares (47), ocurrió el 25 de enero de 2018.
Según la sentencia, recopilada por Univision Noticias, Gavin Lappe disparó a Valladares sin confirmar su identidad ni evaluar la amenaza, lo que llevó a la muerte innecesaria del hondureño.
El juez Kenneth Hoyt determinó que el agente “fue negligente, incluso gravemente negligente, en su respuesta” y que esto causó la muerte del hondureño.
“El tribunal sostiene que el agente Lappe tenía el deber de advertirle a Valladares antes de disparar a través de la ventana rota cuando ni su seguridad ni la de otro agente del FBI estaban en peligro”, escribió Lappe en la orden.
“El agente Lappe actuó con negligencia, incluso negligencia grave, al responder a la situación en ese momento, y la única causa de la muerte de Valladares Sr. fueron los disparos efectuados por el agente Lappe”. A pesar de estar protegido por la inmunidad cualificada, que lo exime de responsabilidad personal, el caso pudo proceder contra el gobierno federal.
La familia de Valladares recibirá una compensación significativa por los daños y perjuicios causados.
Ulises Valladares Jr., el hijo del fallecido y quien tenía solo 12 años al momento del incidente, recibirá 1,3 millones de dólares, es decir, más de 33,2 millones de lempiras.
Mientras que Justina García, madre de Valladares, obtendrá 611,000 dólares (L 15,6 millones).
«Nosotros lo que queríamos era que protegieran a mi hijo, pero solo directamente a quitarle la vida es que fue», dijo la madre a través de Univision Noticias.
Además, se han asignado 475,000 dólares (L 12 millones) para cubrir los honorarios legales.
El trágico evento comenzó con el secuestro de Valladares y su hijo en su propia casa en Conroe, al noreste de Houston. Los secuestradores trasladaron al padre a otra ubicación, mientras que el hijo fue rescatado unas horas después.
Durante el intento de rescate de Valladares padre, los agentes del FBI, incluido Lappe, llegaron a la casa donde estaba retenido.
Sin verificar adecuadamente, Lappe disparó a través de una ventana, matando a Valladares, quien estaba vendado y atado en ese momento.