Diputados y funcionarios se rehúsan a reducir sus salarios

TEGUCIGALPA. Han pasado casi tres meses desde que se presentó la moción para reducir los fondos de los salarios que reciben los diputados y otros funcionarios, pero esta todavía no se ha hecho efectiva.

Ya no se escucha la presión diversos sectores que demandaban austeridad financiera ni propuestas presentadas en el mismo Poder Ejecutivo.

En este sentido, son aproximadamente 1,500 servidores públicos quienes reciben más de 60,000 lempiras mensuales; de ellos unos veinte se llevan un sueldo superior a 200,000 lempiras.

Sin embargo, los burócratas de mediano y alto rango se han negado a que sus remuneraciones sean reducidas para mejorar las finanzas del país.

En el hipotético caso que las estratosféricas sumas que reciben fuesen disminuidas en un 50 por ciento, las arcas del país tendrían un ahorro de 60 millones de lempiras anuales.

Según lo han informado las nuevas autoridades, las finanzas hondureñas están maltrechas y la alternativa presentada es la reducción de la masa salarial que ronda el diez por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).

Esto significa que de cada cien lempiras que produce el país, unos diez están dirigidos a sostener el aparato gubernamental que tiene una población de entre 250,000 y 300,000 funcionarios y empleados.

Hasta la fecha, ninguno de ellos ha hecho manifiesta la decisión de que su planilla sea recortada. Nada más en el pago de sueldos a los legisladores propietarios se realiza un gasto 12 millones de lempiras cada mes.

Sumado a esto, los congresistas no quieren que desaparezca el Fondo Departamental, el que históricamente ha sido manejado como una «piñata» y, eventualmente, también surge de los recursos del pueblo.

Por su parte, la doctora Ligia Ramos, diputada del Partido Salvador De Honduras, expuso que hay dos proyectos de ley, uno que es la reducción del 50%, el cual parece no ser real y el otra es la reducción del 30%. “El único que por su cuenta propia pidió que se le redujera su salario fue el diputado Sergio Castellanos”.

Recientemente, se denunció que esas millonarias cifras siguen siendo repartidos con toda discrecionalidad con el pretexto de que son invertidos en programas y proyectos de beneficio social y de alivio a la pobreza de los diferentes municipios.

Cabe recordar que, la semana anterior, el presidente de la Cámara Legislativa, Luis Redondo, justificó que el Fondo Departamental como tal ya desapareció y explicó que esa asignación monetaria no será otorgada a los congresistas, sino que éstos serán únicamente gestores de los proyectos de desarrollo local.