EE.UU. y Panamá evaluaron estrategias para contener la migración irregular a través de la selva del Darién
PANAMÁ. Laura Richardson, jefa del Comando Sur de Estados Unidos, sostuvo un encuentro con el presidente panameño José Raúl Mulino para discutir sobre la crisis en Venezuela tras el fraude electoral perpetrado por el régimen de Nicolás Maduro, según informó el gobierno de Panamá mediante un comunicado.
“Presidente Mulino y jefa del Comando Sur analizan crisis de Venezuela, migración y seguridad”, indica el texto.
“Debido a que el 66% de los migrantes que pasan por la selva de Darién son de nacionalidad venezolana, el presidente Mulino consideró que la actual situación en Venezuela agravará la crisis migratoria en el hemisferio”, agrega.
Por su parte, la embajada estadounidense dijo que la general Richardson se reunió con Mulino “para conversar sobre cooperación bilateral en seguridad y las estrategias para contener la migración irregular sin precedentes a través de la selva del Darién”, frontera natural entre Colombia y Panamá.
“La general Richardson y la embajadora [estadounidense Mari Carmen] Aponte mostraron preocupación por la inestabilidad democrática y de seguridad en los países del hemisferio”, según el gobierno panameño.
Durante su visita de dos días a Panamá, la jefa militar también se reunió con el canciller panameño, Javier Martínez Acha, y el ministro de Seguridad, Frank Ábrego.
En lo que va de 2024, al menos 212.000 personas han cruzado la selva del Darién, con la intención de ir a Estados Unidos, según la oficina de migraciones de Panamá. En 2023, cruzaron por esa inhóspita jungla más de medio millón de personas, dos tercios de ellas venezolanas.
Mulino anunció este martes que planea convocar a una cumbre de los 17 países, entre ellos Estados Unidos, que el jueves votaron a favor de un fallido proyecto de resolución en el Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), que exigía a Maduro publicar las actas de los comicios.
El Gobierno de Estados Unidos su apoyo explícito a la mediación liderada por Colombia, Brasil y México para tratar de superar la crisis política venezolana tras el fraude electoral del domingo 28 de julio.