Giselle Downing: un reflejo de fortaleza e incansables luchas por amor a sus hijos
Giselle Downing es una aguerrida madre que ha luchado contra el cáncer de mama dos veces, además, su vocación de servicio la ha llevado a ser pieza clave en las labores sociales.

SAN PEDRO SULA. Las madres son seres maravillosos, mujeres llenas de poder y sabiduría, siempre tienen energía para atender a sus hijos y hacerse cargo de múltiples responsabilidades sin importar como se sientan.

Tal es el caso de Giselle Downing, una sampedrana que ha dado todo por sus hijos, y es precisamente el amor por ellos y su inquebrantable fe en Dios, lo que le ha dado las armas para enfrentar la lucha contra el cáncer de mama en dos ocasiones.

Paradójicamente, Giselle ha dedicado gran parte de su vida a ayudar a mujeres que han padecido esta enfermedad, ha brindado charlas de prevención y tratamiento, ha colaborado con múltiples centros médicos, tales como la Liga contra el Cáncer y laboratorio Diagnos en pro de las pacientes. Además, su noble corazón también le ha permitido trabajar de cerca con niños desamparados.

“Nunca imaginé que yo iba a tener cáncer de mama, aunque en mi familia hay 12 miembros que lo han tenido, incluyendo a mi mamá”, manifestó.

La primera vez que fue diagnosticada con cáncer tenía 42 años y, al ser detectado en fase temprana, logró vencerlo en un año. Sin embargo, seis años más tarde, una sombra volvió a oscurecer la vida de Giselle, el cáncer de mama había reaparecido.

“No hay palabras para describir lo que sentí en ese momento, fue una mezcla entre resignación y también pensaba en mis hijos y mi esposo, ese fue el día más duro, porque es horrible que te digan que te vas a morir”, expresó con un nudo en la garganta.

Actitud positiva y apoyo emocional

Giselle recordó las palabras del doctor que la atendió (Dr. Johnson): “yo no la voy a curar, yo la voy a encaminar a que usted viva lo suficiente para que logre conocer a sus nietos”.

“Estas palabras fueron poderosas, yo le pedía mucho a Dios, realmente quería conocer a mis nietos. Y gracias a Dios ya conocí al primero, Carlos Mateo, además, este mes de mayo, en el que celebramos el día de las madres, es demasiado importante para mí, porque nacerá mi segunda nieta, Rebeca”, manifestó con emoción.

Asimismo, Giselle expresó que el apoyo emocional que le ha brindado su familia ha sido un elemento crucial para enfrentar este proceso, su esposo nunca la dejó sola, pese a que ella sentía vergüenza que la viera cuando recién se sometió a una mastectomía bilateral.

“Aprendí a ser una mejor persona, a relajarme y a no preocuparme por cosas que realmente no tienen importancia”, afirmó.

Por otro lado, Giselle indicó que “poder balancear la enfermedad con el resto de mi vida ha sido muy duro, por eso es que yo insisto en la importancia de detectar el cáncer temprano porque en la primera fase no hay necesidad de mastectomía”, aseveró.

Proceso difícil

Pasar mastectomía, quimioterapia, radioterapia es un proceso bien duro, porque todos los tratamientos lo dejan a uno con un cansancio permanente y este efecto dura años, afirmó.

“Si pudiera cambiar esta historia, no lo haría, porque gracias al cáncer tuve lecciones de humildad, aprendí a valorar y a disfrutar más la vida, aprendí a no ser tan estricta, a despegarme de las toxicidades y, por supuesto, mi refugio siempre ha sido Dios, todo esto me ha permitido ser más feliz”, señaló.

Giselle culminó enviando un mensaje a todas las madres de Honduras: “Las mujeres somos la columna vertebral de la sociedad y esa fuerza la sacamos del amor a nuestros hijos, definitivamente. A todas las madres que sufren de cáncer, no se rindan, sigan luchando».

Perfil

• Nombre Completo: Giselle Downing
• Profesión: Licenciada en Administración de Empresas con especialidad en Administración de Hospitales
• Hijos: 5 (Graciela, Juan Carlos, David, Fernando y Nicole)
• Estado Civil: Casada con el doctor Carlos Paz
• Cosas que disfruta: Tiempo en familia, sus mascotas y conectar con la naturaleza