Congreso rechaza renuncia de Salvador Nasralla argumentando que es Ilegal

TEGUCIGALPA. El presidente del Congreso Nacional de Honduras, rechazó la renuncia de Salvador Nasralla a su cargo como designado presidencial, porque de acuerdo a él, esta es ilegal

La justificación presentada por Redondo sobre la renuncia de Nasralla, generó caos durante la sesión del Legislativo, que inició ayer a las 4:00 de la tarde.

De acuerdo al análisis jurídico del Legislativo, leído por Redondo, la renuncia de Nasralla se considera «ilegal», lo que llevó a determinar que no se someterá a votación para evitar que los congresistas incurran en una «responsabilidad» contraria a lo establecido por la Constitución de la República.

Durante la lectura del extenso documento que justificaba la decisión de no tramitar la renuncia de Nasralla como designado presidencial, diputados del Partido Salvador de Honduras (PSH) abandonaron sus asientos y protestaron frente a la junta directiva.

Irohska Elvir, esposa de Nasralla y diputada del PSH, visiblemente molesta, se levantó de su asiento y se dirigió hacia Luis Redondo para golpear su mesa y arrebatarle el micrófono.

Después del incidente, Redondo continuó con la lectura del documento, el cual incluyó referencias a la Constitución, la Ley Orgánica del Congreso Nacional y los derechos políticos de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

«Prefiero no exponer a mis colegas a una acción que podría acarrear consecuencias legales. Esto es respetar la Constitución y el Estado de derecho», declaró Redondo, confirmando que la renuncia de Nasralla no será sometida a votación en el pleno.

El congresista Jorge Cálix, del Partido Libertad y Refundación (Libre), solicitó intervenir, argumentando que Redondo estaba equivocado. Las bancadas expresaron su descontento golpeando sus asientos, y en medio de la discordia, se cerró la sesión.

Iroshka Elvir, por su parte, acusó a Redondo de «violar la ley» al no someter la renuncia de Nasralla y desestimó el análisis jurídico como «sacado de Alicia en el país de las maravillas».

«Le tienen miedo a Salvador Nasralla», opinó Elvir.