Guardaespaldas de Said Lobo Bonilla tenía más de 12 años de trabajar para familia del expresidente «Pepe»

TEGUCIGALPA. Entre llanto y tristeza la madre de Norlan Enrique Rivera Rodríguez (33) dijo que su hijo salió a la 5:00 de la tarde y le volvió a llamar a las 7:00 de la noche para decirle que estaba bien en el trabajo.

Según declaraciones de la progenitora del experto en seguridad, su vástago ya tenía más de ocho años de trabajar como guardaespaldas y chofer de la familia del expresidente Porfirio Lobo Sosa, desde que esté inició su mandato.

“Se fue a las 5 de la tarde y como a las 7 de la noche me dijo que andaba trabajando y me dijo -madre no se preocupe que aquí ando trabajando- me dijo que se iba ir a trabajar y después del trabajo se iba ir a ver la muchacha”, expresó la consternada madre.

Norlan Enrique Rivera Rodríguez, deja tres niñas huérfanas de padre; una tiene 10 años, la otra 3 y la más pequeña a penas cumplirá su primer año, según la madre del ahora occiso, quien de acuerdo a las declaraciones de la madre “él se preocupaba por darles lo mejor”.

“Agregó que «a veces la necesidad los obliga a que ellos anden rodando y porque no hay empleo, y él decía que por ganar un poquito más para el bienestar de sus hijas y para que estudien”, sollozó la madre del infortunado.

Entre el llanto silencioso esta adolorida mujer recordó que su hijo llegaba todos los días a saludarla y siempre antes de ir a trabajar se despedía de ella y toda la familia con un abraso y siempre le decía “te amo mamá”.

Finalmente, destacó las últimas palabras de su hijo, horas antes de que lo asesinaran y fueron “LA AMO”, tras darle un fuerte abrazo que quedan grabados en su mente, para toda la vida