Régimen designó como presidente del Poder Electoral a Elvis Amoroso, funcionario chavista sancionado por EE.UU.

Régimen designó como presidente del Poder Electoral a Elvis Amoroso, funcionario chavista sancionado por EE.UU.

VENEZUELA. El funcionario chavista sancionado por Estados Unidos, Elvis Amoroso, quien en sus antecedentes como servidor del régimen tiene una lista de inhabilitaciones contra varios líderes opositores, fue nombrado presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE) que organizará los comicios presidenciales el próximo año.

“Procedo a informarle al pueblo de Venezuela: como presidente del poder electoral quedó designado el rector Elvis Amoroso”, anunció el propio funcionario, de 60 años, en una declaración a la prensa.

Los integrantes del Consejo Nacional Electoral fueron designados este jueves por la Asamblea Nacional (Parlamento), controlado en su totalidad por la dictadura de Maduro, y quedó conformado por tres rectores vinculados al oficialismo y dos relacionados a la oposición.

La designación del presidente, vicepresidente y encargado de comisiones correspondía a los rectores, según lo establecido en la Ley de Procesos Electorales.

La cúpula del CNE también estará conformada por otros dos rectores chavistas: el militar retirado Carlos Quintero, escogido como vicepresidente de la institución, y Rosalba Gil, quien desempeñaba desde 2021 el cargo de secretaria del Parlamento y ahora asume como presidenta de la Comisión de Registro Electoral.

Amoroso fue incluido en 2017 en una lista de sancionados por Estados Unidos por socavar procesos electorales y censurar a los medios.

“Nos sentimos orgullosos de que nuestra querida Venezuela tenga el sistema electoral más confiable del mundo, así lo vamos a demostrar en cada uno de los procesos electorales que vienen”, aseguró Amoroso.

Aimé Nogal, una de las vinculadas a la oposición, se encargará de la comisión de participación política y financiamiento.

La designación de los rectores ocurre después de que en junio pasado renunciara el pleno de la directiva en una decisión que el entonces presidente del ente, Pedro Calzadilla, justificó como una medida para buscar un CNE que represente “consenso”.