Doña Francisca Pérez no pierde su sonrisa a pesar de que todos los años se convierte en damnificada

Doña Francisca Pérez no pierde su sonrisa a pesar de que todos los años se convierte en damnificada

VILLANUEVA, CORTÉS. Un equipo de periodistas de Más Noticias Televisión (MNTV) Canal 39, se movilizó hasta la “Ciudad que Endulza a Honduras”, con el objetivo de conocer uno de tantos relatos de los “protagonistas” de esta triste historia llamada “inundaciones”, que ha afectado en gran manera la zona norte del país.

En ese sentido, logró encontrar a doña Francisca Pérez (74); una mujer de tez trigueña, estatura baja, contextura gruesa, humilde, pero, sobre todo, amable, con la que pudo tener una amena conversación, en la cual relató parte de lo que ha vivido en esta emergencia nacional, provocada por un frente frío.

Según expresó, para ella, las lluvias se han vuelto el enemigo que año con año la convierten en una damnificada, ya que su pequeña “chocita” siempre es anegada por culpa de los caudalosos ríos Ulúa y Chamelecón.

Este año no fue diferente, pues nuevamente las inundaciones afectaron la comunidad de Brisas del Milagro, de la aldea El Milagro donde por mucho tiempo ha residido junto a sus tres hijos y cinco nietos, a quienes no les quedó otra alternativa que agarrar unos pocos enseres y salir huyendo, por el temor a morir víctimas de las torrenciales tormentas, que simplemente no dan tregua.

“No nos queríamos salir, pero al ver que el agua avanzaba, y a cada momento el nivel crecía, decidimos abandonar con mucho dolor nuestra casa”, relató la septuagenaria, mientras hacía una larga fila para obtener una caja con alimentos.

Cabe destacar que, la humilde mujer junto a sus familiares hace cinco días se refugian en la Escuela Francisco Morazán, donde pasan los días y noches refugiados en un aula, durmiendo en delgadas colchonetas, mientras las aguas bajan para poder regresar a su “casita” a realizar las labores de limpieza.

Ante eso, doña Francisca con mucha tristeza, dijo que no ha sido fácil pasar por esta situación, pues todos los años ella y sus seres queridos se convierten en damnificados, por lo que, aseguró estar acostumbrada.

“Al terminar esta situación tenemos que limpiar nuestra ‘champita’, porque de lo contrario no se aguanta la plaga de zancudos. Ahorita nosotros estamos sintiendo más fuerte estas lluvias, porque saliéndose el río Ulúa y si abren las puertas de ‘El Cajón’ (Represa Hidroeléctrica Francisco Morazán), olvídese, eso es peligroso. Para Eta e Iota mi ‘chocita’ se levantaba, nos tocó detenerla con cabuyas”, sostuvo.

Por otro lado, destacó que las atenciones en el albergue han sido muy buenas, por lo que agradeció a las autoridades de la Municipalidad y a todos los que han hecho posible que se puedan sentir lo más cómodos posibles, pese a las circunstancias.

Por lo que, aseguró sentirse alegre por la visita del alcalde Walter Perdomo, al albergue.

Doña Francisca Pérez, al borde de las lágrimas culminó su relato de una forma inesperada, pues a pesar de su posición, le agradeció al Creador del Universo por estar viva y con salud.

“Yo le doy gracias a Dios por todo, yo siempre confío en Dios, porque Él es Todopoderoso y siempre es bueno con nosotros”.

AYUDA ALIMENTICIA

El alcalde, Walter Perdomo, visitó los distintos albergues del municipio, los cuales están siendo coordinados por los Comité de Emergencia Local (Codel).

En ese sentido, se realizó la entrega de 103 cajas de alimentos en la Escuela Francisco Morazán, enviadas por el Gobierno central, en coordinación con las autoridades locales, a las familias afectadas, quienes se encuentran refugiadas en ese establecimiento.

El edil informó que mañana por parte del Programa Municipal de Salud y sus doctores, se brindará atención médica, ya que en las visitas se han identificado algunos padecimientos en los albergados como ser problemas de presión, diabetes, conjuntivitis y hongos en los pies.