En prisión sigue asesino de dos hermanos

En prisión sigue asesino de dos hermanos

DANLÍ, EL PARAÍSO. Agentes de Tribunales adscritos a la Fiscalía de la Niñez, en audiencia inicial lograron que un juez decretara auto de formal procesamiento con la medida cautelar de prisión preventiva en contra de Allan Shistofer Viera Mendoza, por suponerlo responsable de dos delitos de asesinato en concurso real en perjuicio de Luis André Salazar Gonzales (15) y Elián Joshua Salazar González (14).

Las avegiguaciones efectuadas por los agentes la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), establecen que el pasado 30 de septiembre, a las 7:00 p.m., los ofendidos se encontraban en su vivienda ubicada en el barrio las Lomitas Número Dos, de la ciudad de El Paraíso, El Paraíso, cuando llegó a bordo de una motocicleta el ahora imputado, con un arma de fuego en sus manos, ingresando a la vivienda y disparando en varias ocasiones contra la humanidad de los menores, causándoles la muerte, y que una vez ejecutado el doble asesinato huyó a bordo de una motocicleta.

Es así que el pasado 2 de octubre, los agentes de la DPI, fueron informados que el autor material del asesinato de los menores, se encontraba en un bar llamado “El Changarro”, por lo que al ser requerido, se le practicó un registro, encontrándole un arma de fuego calibre 45 milímetros, por lo que fue detenido por el delito de porte ilegal de arma de fuego, en perjuicio del orden público.

De acuerdo con los investigadores, el calibre del arma decomisada al sospechoso coincide con los casquillos, encontrados en la escena del crimen donde fueron asesinados los menores de edad, por ello, el Ministerio Público (MP) solicitó a los Laboratorios Balísticos de Medicina Forense, una prueba al arma de fuego, las balas y los casquillos encontrados en la escena del crimen.

En consecuencia, la prueba científica plasmada en el dictamen balístico concluye que los casquillos recibidos como indicio pertenecen al calibre 45 y al ser comparados microscópicamente con las muestras, el patrón de la marca de la pistola, observaron iguales características de percusión y de bloque de cierre, por lo que, se determina que las balas sí fueron disparadas por el arma periciada.

Asimismo, las balas recibidas como indicio pertenecen al calibre 45 y al ser comparadas microscópicamente con las muestras del patrón del arma analizada, se observan iguales tipologías con el rayado balístico, por lo que se determina que sí fueron disparadas por el arma periciada; por lo que se establece mediante prueba irrefutable que las balas que acabaron con la vida de los menores de edad, fueron disparadas por el arma que portaba el ahora imputado.