“Micro y Pequeña Industria pierde L10 millones diarios por apagones”: ANMPIH

SAN PEDRO SULA. Los constantes cortes de energía eléctrica, mejor conocidos como “apagones” continúan provocando pérdidas millonarias para la población hondureña en varias zonas del territorio nacional, siendo la costa norte una de las más afectadas por esa problemática.

En ese sentido, el presidente de la Asociación Nacional de la Mediana y Pequeña Industria de Honduras (ANMPIH), Efraín Rodríguez, dio a conocer que los «apagones» ha sido una constante durante las últimas dos décadas, por lo que ha sido algo que ha venido afectando mucho a los sectores productivos, la generación de empleo en el país y la inversión.

No obstante, aseguró que ahora que la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE), está en “manos” del Gobierno, tienen expectativas positivas de que se pueda avanzar en la recuperación de la estatal.

“Ya hemos visto algunos avances, como ser la estabilidad en las tarifas de la ENEE, pues no se han dado incrementos en los últimos años. También, de alguna manera se ha reducido los racionamientos, ya no se está dando la lectura promediada, y esto es un avance”, aseguró.

Sin embargo, al ser consultado ¿cuánto está perdiendo el rubro de la Micro y Pequeña industria por los constantes apagones?, Rodríguez sostuvo que “haciendo una proyección rápida, podríamos calcular que al menos unos 10 millones de lempiras diarios, se pueden perder en un apagón prolongado de cuatro a 12 horas, esto se puede duplicar de acuerdo a la cantidad de horas, tirando un promedio quizás a diario esto podría generar pérdidas en el ámbito nacional, a nivel de la micro y pequeña empresa, si sumamos la mediana y gran empresa es mucho más, podría llegar hasta los 30 o 40 millones de lempiras diarios si continúan estos racionamientos, pero tenemos confianza que esto se va a superar y que es un proceso de incorporación de las nuevas generadoras de energía que se están instalando en el país”.

ADEMÁS: Efraín Rodríguez, afirmó que, si los «apagones» continúan así de constantes, podrían provocar la pérdida de empleos, porque las empresas se irán debilitando y no podrán sostener a sus trabajadores.