Patronato de Miami denuncia que Oenegés no han hecho nada por su comunidad
Asimismo, solicitó que las autoridades correspondientes visiten su localidad para buscar soluciones viables ante la erosión de la playa.

TELA, ATLÁNTIDA. El patronato de la comunidad garífuna de Miami, ubicada en este término municipal, a través de un comunicado le hizo saber importante información a la comunidad internacional, Gobierno central, Gobierno local y a la población en general, referente a diversas problemáticas a las que se enfrentan, entre ellas la destrucción de al menos 20 metros de la playa.

Asimismo, denunció que las comunidades garífunas y ladinas han sido utilizadas por Organizaciones No Gubernamentales (Oenegés) “ambientalistas” como herramientas para obtener millones de dólares, y de esta manera han recibido fondos durante décadas, mismo que nunca han sido invertidos en las localidades que “pretenden ayudar”.

De igual manera, lamentó que cuando Miami se ha visto amenazada por desastres naturales o la destrucción desmedida de la mega industria, esas instituciones nunca han actuado o apoyado para defender los intereses de la misma; al contrario, han aprovechado esas eventualidades para obtener más fondos sin dejar ningún beneficio.

Además, que cuando se enfrentan a los efectos del cambio climático, causados por factores fuera del control de sus humildes comunidades, como es el caso de la erosión de la playa de la comunidad de Miami, en lugar de ayudar a la resiliencia, son hostigados, satanizados y amenazados por querer proteger sus bienes y su manera de vivir.

Igualmente, denunció que ninguna de esas Oenegés ofrece soluciones reales y factibles al desempleo, la desesperanza y las dificultades de vida que enfrentan en sus comunidades, debido a la falta de servicios básicos como agua potable, energía eléctrica, clínicas de salud, calles pavimentadas y sistemas de alcantarillado necesarios para tener vidas dignas en pleno siglo 21.

Ante esto, aseguró que los pobladores están emigrando en masa, debido a las dificultades a las que se enfrentan, y que además esto es agravado por el hostigamiento perpetuo de esas instituciones en nombre de procesos administrativos que solo se aplican a los indefensos y vulnerables para justificar sus millonarios presupuestos.

Debido a todas estas problemáticas, el patronato de la comunidad de Miami recomendó que las Oenegés, deberían tener como prioridad principal el bienestar de las comunidades y no el de sus propios intereses financieros.

POSTURA AL RESPECTO

“Anunciamos a los organismos internacionales que la comunidad de Miami no trabajará con las organizaciones Prolansate (Fundación para la Protección de Lancetilla, Punta Sal y Texiguat), Amatela (Asociación Amigos de los Arrecifes de Tela), ‘Coral Reef Alliance’ y/o cualquier otra que siga la línea de acoso injusto e inhumano al que nuestras comunidades vulnerables están siendo sometidas por estas instituciones”, reza el documento.

Asimismo, solicitó que la comunidad internacional no financie a esas instituciones, pero sí que visite sus comunidades para llevar a cabo auditorías en las mismas, con el fin de verificar “In Situ” que las instituciones antes mencionadas han recibido fondos del Estado y de la comunidad internacional durante décadas; sin embargo, no han dejado nada tangible para mejorar la calidad de vida de los habitantes de esas localidades.

“Invitamos a nuestras comunidades vecinas y amigas, ladinas y garífunas, a unirse a este movimiento para recuperar el control sobre el progreso y desarrollo de nuestras comunidades, y para rechazar la intervención y el acoso constante de estas Oenegés, que solo buscan el beneficio económico de sus instituciones, sin importarles el sufrimiento y dolor de nuestras comunidades”. Finalmente, solicitamos a las verdaderas autoridades de nuestra nación, la UMA (Unidad de Medio Ambiente de la Alcaldía) y al IFC (Instituto de Ciencias Forestales), que visiten nuestra comunidad para buscar soluciones viables a la erosión de nuestra playa, ya que dejarla perder por un evento aislado de erosión sería devastador para esta comunidad, que genera la mayor parte de sus ingresos a través del turismo de playa en estos meses de verano”.