Titular de la Serna asegura que cárcel en Isla del Cisne es una realidad

Titular de la Serna asegura que cárcel en Isla del Cisne es una realidad

TEGUCIGALPA. Pese a que especialistas en materia de construcción de centros penales, aseguran que pretender hacer una cárcel en la Isla del Cisne es una “terquedad” y “mero capricho”, el titular de la Secretaría de Recursos Naturales (Serna), Lucky Medina, dio a conocer que la edificación del centro penitenciario en esa zona es una realidad.

“La cárcel en la Isla del Cisne se va a construir, ya hemos visitado el terreno hace algunos días, para ver el equipo de profesionales para el estudio del cuerpo ambiental”, precisó Medina, tras agregar que en el área grande de la Isla del Cisne ya tiene un impacto significativo desde hace varias décadas por la edificación de una pista de aterrizaje, la estructura de una radiocomunicación y cultivos agrícolas.

Por ello, el funcionario dijo que hay un alto impacto en la isla y la gente tiene que entenderlo, ya que con la construcción de la cárcel buscan que el impacto ambiental sea mínimo, pues esta contara con su propia generación de energía, tratamiento de la basura y desechos sólidos, además que instalarán el tratamiento de aguas residuales, enfatizó Medina.

“Aseguramos que la isla pequeña, que es donde está la mayor riqueza y la diversidad biológica se mantendrá y se conservará a cabalidad, no pasará nada en la Isla del Cisne”, aseveró el funcionario, al tiempo que añadió que “la vamos a proteger, tenemos el compromiso de protegerla, cuidarla y utilizarla para fines científicos de conservación ambiental”.

También puntualizó que se ha tenido buenos avances del estudio de impacto ambiental desde que se comenzó la revisión de prefactibilidad por parte de los técnicos y que como Gobierno han planteado un espacio para Centro de Monitoreo Biológico.

Concluyó que con la construcción de este proyecto se busca recuperar la seguridad y tranquilidad del pueblo hondureño ante el tema de la extorsión. “Hay que aislar a los delincuentes y crimen organizado del punto más alejado del territorio nacional, esa es la medida”.

ESPECIALISTA
La semana pasada, el arquitecto Óscar René Hernández, uno de los diseñadores de la Penitenciaría de Támara, comentó, “imagínese que si no podemos controlar ni siquiera en tierra firme los centros penales, que pasará a 250 kilómetros de la costa con el tiempo de reacción en una situación de amotinamiento”.
Ejemplificó además que en tierra firme el costo de construcción en el país ronda en promedio los 15 mil lempiras por metro cuadrado y en la isla eso puede andar entre treinta y 45 mil lempiras por metro cuadrado, un incrementó muy significativo.
Ante ese panorama, Hernández reflexionó que el proyecto de una megacárcel sería más viable en tierra firme, “no es factible” hacerlo en la isla, además de las implicaciones ecológicas en la zona. “Hay suficientes espacios y lugares adecuados para poderlo hacer, hay muchas áreas por ser desarrolladas, incluso los penales deberían ser autosustentables. Se puede crear una agroindustria en ellos. Existen formas de abordar la problemática carcelaria y no necesariamente cerrarnos a que tiene que ser en una isla por asuntos de seguridad nacional, quisiera que me expliquen que significa eso”.

A la vez enfatizó que el Colegio de Arquitectos de Honduras no está de acuerdo con la idea de la actual administración gubernamental. “Se han encaprichado que la cárcel debe estar ahí solo porque fue una promesa de campaña; por cualquier lado que pretenda verlo, es inaceptable”.